EL BELÉN

INTRODUCCIÓN

El Belén que protagoniza este Blog, nace de una tradición ancestral que es la representación a través del tiempo de un acontecimiento bíblico e histórico como es el nacimiento de Jesús de Nazaret; también es fruto del ingenio de un artista plástico que refleja sus inquietudes estéticas y sus propias creencias junto al amor por su tierra, sus usos y costumbres. Bajo esta premisa se crea una auténtica obra de arte en miniatura, rica en matices, que tiene todo el valor de la más pura creatividad.

EL BELÉN

LA MATANZA DEL CERDO
“El arte de las manos” surge en su configuración actual como un como belén casero, dentro de la tradición cultural hogareña, en el año 2007. Progresivamente aquel modesto belén de los primeros tiempos va creciendo en contenido y, al mismo tiempo, cambiando de ubicación: de la modesta y sencilla mesa pasa al salón-comedor de la vivienda, a la superficie del garaje y finalmente es expuesto al público en la amplitud del salón municipal, donde se expone por primera vez en 2010, cosechando unas excelentes críticas por todos cuantos lo visitaron.

EL SUEÑO DE SAN JOSÉ
Este belén está ambientado en la huerta de Murcia, por lo que podríamos definirlo como costumbrista ya que muchos de sus elementos encajan perfectamente en lo que fue parte esencial de una de las vegas más fértiles y hermosas de Europa. Así, pues, tenemos junto al clásico pesebre la no menos típica barraca huertana, la noria, el mesón, los huertos de limoneros, los palmerales y escenas cotidianas del más fiel costumbrismo, como la matanza del cerdo, el taller de escobas y cañizos o el mercadillo semanal.

EL PUEBLO
El montaje artístico muestra los resultados de años de trabajo, de una paciente y silenciosa labor artesanal, donde el autor se ha volcado materialmente en representar con la máxima fidelidad todo el conjunto de piezas que lo conforman, con un grado de efectividad asombroso. 

HUERTA, PUEBLO Y DESIERTO

EGIPTO
El belén se divide en tres grandes bloques: la huerta, el pueblo y el desierto. Entre pueblo y huerta transcurre la primera fase del montaje que abarca, desde los desposorios de María y José, hasta la presentación de Jesús niño en el templo. La segunda parte, que comienza con la huída a Egipto y culmina con la infancia de Jesús en Nazaret, transcurre entre el pueblo y el desierto.

No es casualidad que el autor haya optado por esta ubicación, huerta y desierto, símbolo de la antítesis de dos situaciones geográficas tan dispares, polos opuestos que se unen y separan, confluyen y se articulan en el pueblo que es el nexo de unión entre ambas. En este sentido el artista ha conseguido una realidad pictórica de bellos matices y una gama de ricos contrastes que lo hace tan singular.